3:25 | Autor Iglesia Hogar

SID



Servicio
informativo
d
iocesano




año
V - 240



03-Dic-2009







Año
Sacerdotal
“Fidelidad
de Cristo, fidelidad del sacerdote”




Sumario



El
Santo Padre


Benedicto
XVI: Adviento, vivir el presente esperando el
futuro


El
Papa pide oraciones por el fin de todo abuso de
niños


La
paz Argentina-Chile, "ejemplo luminoso de la fuerza del
espíritu"


El
Papa pide una atención especial a los menores
inmigrantes


Homenaje Floral a la Inmaculada
Concepción - TV


La
Santa Sede


Tercera
fase de las reuniones entre anglicanos y
católicos


Benedicto XVI a los
teólogos: Dios se deja comprender por los más
humildes


El
Papa a Argentina y Chile: Paz es defender la vida y combatir la
pobreza


Una aldea mediática para los
cristianos de Medio Oriente


El
patrimonio cultural cristiano, fundamental para la
humanidad


Internacional


Cita
en Roma para historiadores de la independencia de la América
española


El alma del sacerdote debe tener
“musculatura de Rambo”


Una
eterna deuda de gratitud con Angelo Roncalli


Fuerte llamado a defender
vida, matrimonio y libertad
religiosa


Sida:
eufemismos, manipulaciones y verdadera
prevención


V Encuentro Latinoamericano
de Pastoral de la Salud


El
falso coma de Rom Houben no es un caso aislado


Nacional


Inundaciones:
Cáritas ayuda en la emergencia


El porqué del último documento
del Episcopado


Llegó a su fin la peregrinación
del corazón del Cura de Ars


Las candidaturas testimoniales
son una burla a la ciudadanía


Encuentro
Nacional de Radios católicas


Buscan la imagen para un
Congreso de Doctrina Social


Oración
de los obispos argentinos para el Año Sacerdotal



El
Obispo


Agenda
del Señor Obispo - mes de diciembre


36° Marcha de la Esperanza - 05 de
Diciembre 2009 -16 hs


"Madre,
a tu corazón confiamos la causa por la vida" -
Oración


Ordenaciones y Primeras
Misas Solemnes


La
Diócesis


Misa
– finalización de cursos del Cedier


Parroquia Jesús Obrero-
Invitación para Bendición y entronización de la imagen de Jesús
Obrero


Encuentro de oración y
reflexión en el año
sacerdotal


Adviento y Navidad en
Iglesia Catedral -Celebraciones y Actividades


Parroquia
San Pablo – Nuevos Horarios


JUREC –Invitación Misa de
Cierre de Año Lectivo


Encuentro
de oración y reflexión en el año
sacerdotal-invitación


5º edición - Feria del Libro
2009 -“Mar del Plata: Puerto de
Lectura”


Conferencia
Psicoeducativa - charla-taller interactiva


Gruta de Nuestra Señora de
Lourdes - Actividades Diciembre
2009


Parroquia Cristo Rey -
Actividades para los próximos meses


Ejercicios Espirituales
para Religiosas y Consagradas


Profundicemos
en la Liturgia (131)...columna del P. Ariel
Sueiro




Contenido



Benedicto
XVI: Adviento, vivir el presente esperando el futuro


CIUDAD
DEL VATICANO, lunes 30 de noviembre de 2009 (ZENIT.org).- “El Adviento es
el tiempo de la presencia y de la espera de lo eterno”, un presente “lleno
de sentido”. Con estas palabras inauguró el Papa Benedicto XVI el nuevo
Año Litúrgico, el pasado sábado en la Basílica de San Pedro.
Durante la
homilía de las Primeras Vísperas del I domingo de Adviento, el Papa
explicó el significado que para los cristianos reviste este “tiempo
litúrgico fuerte que estamos empezando”, y que “nos invita a detenernos en
silencio para captar una presencia”.
El Papa explicó que el término
latino adventus indicaba en el mundo antiguo la visita de un rey o
funcionario de alto rango a una provincia, pero también la manifestación
de la divinidad oculta.
Para los cristianos, adventus significaba “Dios
está aquí, no se ha retirado del mundo, no nos ha dejado solos. Aunque no
lo podemos ver y tocar como sucede con las realidades sensibles, Él está
aquí y viene a visitarnos de múltiples maneras”.
“El Adviento cristiano
se convierte de esta forma en ocasión para volver a despertar en nosotros
el verdadero sentido de la espera, volviendo al corazón de nuestra fe que
es el misterio de Cristo, el Mesías esperado por largos siglos y nacido en
la pobreza de Belén”.
Este tiempo “nos invita y nos estimula a
contemplar al Señor presente. La certeza de su presencia ¿no debería
ayudarnos a ver el mundo con ojos diversos?”, se preguntó.
“Todos
tenemos experiencia, en la existencia cotidiana, de tener poco tiempo para
el Señor y poco tiempo también para nosotros”, explicó el Papa. El
Adviento “es una invitación a comprender que cada acontecimiento de la
jornada es un gesto que Dios nos dirige, signo de la atención que tiene
por cada uno de nosotros”.
“¡Cuántas veces Dios nos hace percibir algo
de su amor! ¡Tener, por así decir, un “diario interior” de este amor sería
una tarea bonita y saludable para nuestra vida!”, añadió.
Además de
“presencia”, explicó el pontífice, este tiempo habla también de “espera
que es al mismo tiempo esperanza”.
“El Adviento nos empuja a entender
el sentido del tiempo y de la historia como "kairós", como ocasión
favorable para nuestra salvación”, prosiguió.
“El hombre, en su vida,
está en constante espera: cuando es niño quiere crecer, de adulto tiende a
la realización y al éxito, avanzando en la edad, aspira al merecido
descanso. Pero llega el tiempo en el que descubre que ha esperado
demasiado poco si, más allá de la profesión o de la posición social, no le
queda nada más que esperar”.
“La esperanza marca el camino de la
humanidad, pero para los cristianos está animada por una certeza: el Señor
está presente en el transcurso de nuestra vida, nos acompaña y un día
secará también nuestras lágrimas. Un día no lejano, todo encontrará su
cumplimiento en el Reino de Dios, Reino de justicia y de paz”, añadió el
Papa.
Pero esta espera, explicó, debe llenarse de “un presente dotado
de sentido”, de lo contrario “corre el riesgo de convertirse en
insoportable”.
“Si Jesús está presente, no existe ningún tiempo privado
de sentido y vacío”, añadió, “podemos dirigirle la palabra, presentarle
los sufrimientos que nos afligen, la impaciencia, las preguntas que nos
brotan del corazón. ¡Estamos seguros de que nos escucha
siempre!”.
“Cuando el tiempo está dotado de sentido y percibimos en
cada instante algo específico y valioso, entonces la alegría de la espera
hace el presente más precioso. Queridos hermanos y hermanas, vivamos
intensamente el presente donde ya nos alcanzan los dones del Señor,
vivámoslo proyectados hacia el futuro, un futuro lleno de esperanza”,
concluyó el Papa.

(Sumario)






El Papa
pide oraciones por el fin de todo abuso de niños


CIUDAD
DEL VATICANO, lunes 30 de noviembre de 2009 (ZENIT.org).- En este mes de
diciembre, Benedicto XVI pide oraciones de todos en la Iglesia para que
acaben finalmente todo tipo de abusos de niños.
Es la propuesta que
hace en las intenciones de oración para el mes que comienza contenidas en
la carta pontificia que el Papa ha confiado al Apostolado de la Oración,
iniciativa que siguen cerca de 50 millones de personas en los cinco
continentes.
El obispo de Roma presenta dos intenciones, una general y
la otra misionera.
La intención general para el mes de diciembre es:
"Para que los niños sean respetados, amados y no sean jamás explotados de
ninguna manera".

La intención misionera para este mes es: "Para que
en Navidad los Pueblos de la tierra reconozcan en el Verbo Encarnado la
luz que ilumina a toda la humanidad, y las Naciones abran las puertas a
Cristo, Salvador del mundo".


(Sumario)






La paz Argentina-Chile, "ejemplo luminoso de la fuerza del
espíritu"


Ciudad
del Vaticano, 28 Nov. 09 (AICA) El papa Benedicto XVI consideró hoy,
delante de las presidentas Cristina Kirchner y Michelle Bachelet, como
“una solución digna, razonable y ecuánime" el Tratado de Paz y Amistad
entre la Argentina y Chile que evitó la guerra, que “estaba a punto de
estallar”, entre dos países “católicos” que se consideran
“hermanos”.
El Sumo Pontífice recordó la histórica negociación papal,
suscripta hace 25 años, como "un ejemplo luminoso de la fuerza del
espíritu humano y de la voluntad de paz frente a la barbarie y a la
sinrazón de la violencia y la guerra como medio para resolver las
diferencias".
“Este acontecimiento que hoy conmemoramos forma ya parte
de la gran historia de dos nobles Naciones, pero también de toda América
Latina”, subrayó el Papa en su discurso en la Sala Clementina ante las
delegaciones de los dos países.
El Papa consideró que el tratado "está
indisolublemente unido” a la figura de Juan Pablo II, a quien definió como
"un mensajero y artífice de las paz, que no dudó en aceptar la delicada y
crucial tarea de mediador", y destacó la “ayuda inestimable” en ese
proceso de cardenal Antonio Samoré, quien, precisó, “siguió personalmente
todos los avatares de esas largas y complejas negociaciones, hasta la
definición de la propuesta que llevó a la firma del Tratado”.
Antes, el
Papa recibió en audiencias separadas en su biblioteca privada a Fernández
de Kirchner y Bachelet.
Las presidentas obsequiaron en conjunto al Papa
un bajo relieve de cobre con un grabado de América latina y las
inscripciones de Juan Pablo II y Benedicto XVI. En tanto, el Papa les
regaló una medalla de su pontificado.
Ambas presidentas depositaron
después una ofrenda floral ante la tumba de Juan Pablo II en la cripta de
la basílica de San Pedro, donde se rezó por la paz, y a continuación
descubrieron una placa conmemorativa en la Casina Pío IV, ubicada en los
jardines vaticanos, y en donde se llevaron a cabo las históricas
negociaciones guiadas por el cardenal Samoré.
La primera mandataria
también se entrevistó con el Secretario de Estado, cardenal Tarcisio
Bertone, con quien dialogó sobre diversos temas.

Texto
completo del discurso

1.
Con sumo gusto les recibo y les doy la bienvenida en esta Sede de
Pedro, con motivo de la celebración del 25 aniversario del Tratado de Paz
y Amistad, que clausuró el diferendo territorial que mantuvieron durante
largo tiempo sus respectivos Países en la zona Austral. En efecto, es una
oportuna y feliz conmemoración de aquellas intensas negociaciones que, con
la mediación pontificia, concluyeron con una solución digna, razonable y
ecuánime, evitando así un conflicto armado que estaba a punto de enfrentar
a dos pueblos hermanos.

2. El Tratado de Paz y Amistad, y la
mediación que lo hizo posible, está indisolublemente unido a la amada
figura del Papa Juan Pablo II, el cual, movido por sentimientos de afecto
hacia esas queridas Naciones y en sintonía con su incansable labor como
mensajero y artífice de paz, no dudó en aceptar la delicada y crucial
tarea de ser mediador en dicho contencioso. Con la ayuda inestimable del
Cardenal Antonio Samorè, él mismo siguió personalmente todos los avatares
de esas largas y complejas negociaciones, hasta la definición de la
propuesta que llevó a la firma del Tratado, en presencia de las
delegaciones de ambos Países y del entonces Secretario de Estado de Su
Santidad y Prefecto del Consejo para los Asuntos Públicos de la Iglesia,
Cardenal Agostino Casaroli.
La intervención pontificia fue una
respuesta también a un expreso pedido de los Episcopados de Chile y
Argentina, los cuales, en comunión con la Santa Sede, ofrecieron su
decisiva colaboración para la consecución de dicho acuerdo. Es de
agradecer, además, los esfuerzos de todas las personas que, en los
Gobiernos y delegaciones diplomáticas de ambos Países, dieron su positiva
contribución para llevar adelante ese camino de resolución pacífica,
cumpliendo así los profundos anhelos de paz de la población argentina y
chilena.

3. A veinticinco años de distancia, podemos
constatar con satisfacción cómo aquel histórico evento ha contribuido
benéficamente a reforzar en ambos Países los sentimientos de fraternidad,
así como una más decidida cooperación e integración, concretada en
numerosos proyectos económicos, intercambios culturales e importantes
obras de infraestructura, superando de este modo prejuicios, sospechas y
reticencias del pasado. En realidad, Chile y Argentina no son sólo dos
Naciones vecinas sino mucho más: son dos Pueblos hermanos con una vocación
común de fraternidad, de respeto y amistad, que es fruto en gran parte de
la tradición católica que está en la base de su historia y de su rico
patrimonio cultural y espiritual.
Este acontecimiento que hoy
conmemoramos forma ya parte de la gran historia de dos nobles Naciones,
pero también de toda América Latina. El Tratado de Paz y Amistad es un
ejemplo luminoso de la fuerza del espíritu humano y de la voluntad de paz
frente a la barbarie y la sinrazón de la violencia y la guerra como medio
para resolver las diferencias. Una vez más, hay que tener presente las
palabras que mi Predecesor, el Papa Pío XII, pronunció en momentos
especialmente difíciles de la historia: «Nada se pierde con la paz. Todo
puede perderse con la guerra» (Radiomensaje, 24 agosto 1939). Por tanto,
es necesario perseverar en todo momento con voluntad firme y hasta las
últimas consecuencias en tratar de resolver las controversias con
verdadera voluntad de diálogo y de acuerdo, a través de pacientes
negociaciones y necesarios compromisos, y teniendo siempre en cuenta las
justas exigencias y legítimos intereses de todos.

4. Para
que la causa de la paz se abra camino en la mente y el corazón de todos
los hombres y, de modo especial, de aquellos que están llamados a servir a
sus ciudadanos desde las más altas magistraturas de las naciones, es
preciso que esté apoyada en firmes convicciones morales, en la serenidad
de los ánimos, a veces tensos y polarizados, y en la búsqueda constante
del bien común nacional, regional y mundial. La consecución de la paz, en
efecto, requiere la promoción de una auténtica cultura de la vida, que
respete la dignidad del ser humano en plenitud, unida al fortalecimiento
de la familia como célula básica de la sociedad. Requiere también la lucha
contra la pobreza y la corrupción, el acceso a una educación de calidad
para todos, un crecimiento económico solidario, la consolidación de la
democracia y la erradicación de la violencia y la explotación,
especialmente contra las mujeres y los niños.

5. La Iglesia
católica, que continúa en la tierra la misión de Cristo, que con su muerte
en la cruz trajo la paz al mundo (cf. Ef 2, 14-17), no deja de proclamar a
todos su mensaje de salvación y de reconciliación y, uniendo sus esfuerzos
a todos los hombres de buena voluntad, se entrega con ahínco para cumplir
las aspiraciones de paz y concordia de toda la
humanidad.
Excelentísimas Señoras Presidentas, queridos amigos,
agradeciéndoles nuevamente su significativa visita, dirijo mi mirada al
Cristo de los Andes, en la cumbre de la Cordillera, y le pido que, como un
don constante de su gracia, selle para siempre la paz y la amistad entre
argentinos y chilenos, al mismo tiempo que como prenda de mi afecto les
imparto una especial Bendición Apostólica.

(Sumario)






El Papa
pide una atención especial a los menores inmigrantes


CIUDAD
DEL VATICANO, viernes 27 de noviembre de 2009 (ZENIT.org).- Es necesario
reconocer los derechos de los niños igual que se reconocen los de los
adultos, y más cuando se encuentran en situaciones de precariedad a causa
de la inmigración.
Así lo afirma el Papa Benedicto XVI en su mensaje de
este año para la Jornada Mundial del Migrante, que ha sido dada a conocer
hoy públicamente en rueda de prensa en la Santa Sede.
Según el Papa, el
tema de este año, "Los emigrantes y los refugiados menores de edad", toca
“un aspecto al que los cristianos prestan gran atención”, que es el de la
protección de los derechos del niño.
“ El propio Jesús de pequeño vivió
la experiencia del emigrante porque, como narra el Evangelio, para huir de
la amenaza de Herodes tuvo que refugiarse en Egipto junto con José y
María”, recuerda.
El reconocimiento de los derechos del niño,
“lamentablemente”, afirma Benedicto XVI, “en la realidad esto no siempre
sucede”.
“Aunque en la opinión pública crece la conciencia de la
necesidad de una acción concreta e incisiva para la protección de los
menores de edad, de hecho, muchos de ellos son abandonados y, de varias
maneras, corren el riesgo de ser explotados”.
Al respecto, recordó unas
palabras del propio Juan Pablo II, en un mensaje enviado el 22 de
septiembre de 1990 al Secretario General de las Naciones Unidas con
ocasión de la Cumbre Mundial para los Niños.
"He sido testigo -escribía
el anterior pontífice- de la desgarradora tragedia de millones de niños en
los distintos continentes. Ellos son los más vulnerables porque son los
que menos pueden hacer oír su voz"
Benedicto XVI pide “que se dedique
la debida atención a los emigrantes menores de edad, que necesitan un
ambiente social que permita y favorezca su desarrollo físico, cultural,
espiritual y moral”.
“Vivir en un país extranjero sin puntos de
referencia reales les genera innumerables trastornos y dificultades, a
veces graves, especialmente a los que se ven privados del apoyo de su
familia”.
“Un aspecto típico de la emigración infantil es la situación
de los chicos nacidos en los países de acogida o la de los hijos que no
viven con sus padres, que emigraron después de su nacimiento, sino que se
reúnen con ellos más tarde”, afirma.
Estos adolescentes “forman parte
de dos culturas, con las ventajas y las problemáticas ligadas a su doble
pertenencia”, lo cual sin embargo puede ser “una oportunidad” para el
diálogo intercultural.
“Es importante que se les dé la posibilidad de
acudir con regularidad a la escuela y de acceder posteriormente al mundo
del trabajo, y que se facilite su integración social gracias a estructuras
formativas y sociales oportunas”, pide el Papa.
Para concluir,
Benedicto XVI se dirige a las estructuras y asociaciones católicas que
trabajan con los inmigrantes, a quienes pide que actúen “animadas por
espíritu de fe y de caridad”.
“Cada intervención concreta nuestra tiene
que alimentarse ante todo de fe en la acción de la gracia y de la divina
Providencia. De este modo, también la acogida y la solidaridad con el
extranjero, especialmente si se trata de niños, se convierte en anuncio
del Evangelio de la solidaridad”.
(Sumario)






Homenaje
Floral a la Inmaculada Concepción - TV

El
martes 8 de diciembre de 2009, Solemnidad de la Inmaculada Concepción, en
la Plaza de España de la ciudad de Roma el Santo Padre Benedicto XVI
presidirá el Acto de veneración a la Inmaculada.













12:00


de
Bs. As. – en vivo-EWTN-Canal 88 de Multicanal y La Capital Cable
-Mar del Plata-Canal 416 de Multicanal y CableVisión Digital-Canal
350 de DIRECTV


22:00


de
Buenos Aires – repetición


12:00


de
Bs. As. – RAI International (en vivo) -Canal 76 de Multicanal de Mar
del Plata -Canal 603 de Multicanal y CableVisión Digital -Canal 766
de DIRECTV


(Sumario)






Tercera fase de las reuniones entre anglicanos y
católicos


Ciudad del Vaticano, 2 Dic. 09 (AICA) Un comunicado
de prensa de la Oficina de Información de la Santa Sede, publicado el
sábado 28 de noviembre, señala que tras el reciente encuentro celebrado en
el Vaticano el pasado 21 de noviembre entre el papa Benedicto XVI y el
arzobispo de Canterbury, Rowan Williams, en 2010 comenzará la tercera fase
de las reuniones de la Comisión Internacional entre Anglicanos y
Católicos” (ARCIC, Anglican-Roman Catholic International
Commission).
En aquel encuentro “se reiteró el deseo de reforzar las
relaciones ecuménicas entre anglicanos y católicos”, destaca el
comunicado.
El texto explica que “en la tercera fase se tratarán
cuestiones fundamentales referentes a la Iglesia como comunión local y
universal, y cómo en comunión la Iglesia local y universal llega a
discernir la justa enseñanza moral”.
“En los próximos meses -concluye
el comunicado- se nombrarán los miembros de la Comisión y será anunciada
la fecha de su primer encuentro”.
Las dos estructuras eclesiales a
través de las cuales se lleva adelante el diálogo teológico entre
católicos y anglicanos son la ARCIC -instituida en 1970- y la IARCCUM
(Comisión Internacional Anglicano-Católica para la Unidad y la Misión),
creada en el año 2000.
La ARCIC se concentra en temas que suscitan
controversias teológicas entre católicos y anglicanos, mientras que los
fines de la IARCCUM son reforzar los objetivos de la ARCIC y encontrar
métodos para plasmar en hechos concretos el grado de comunión espiritual
alcanzado.
La primera fase de trabajo de la ARCIC (1970-1981) fue
sellada por las declaraciones sobre la Eucaristía y sobre el ministerio y
por dos declaraciones sobre la autoridad en la Iglesia.
La segunda fase
(1983-2005) concluyó con la publicación de una histórica declaración
titulada “María: Gracia y Esperanza en Cristo”.
Ese documento fue fruto
de seis años de trabajo por parte de los 18 miembros de la Comisión, e
incluye las declaraciones sobre la salvación y sobre la justificación,
sobre la naturaleza de la Iglesia y ulteriores estudios sobre la autoridad
de la Iglesia.
Durante los últimos veinte años, la ARCIC publicó cuatro
declaraciones conjuntas: “Salvación e Iglesia” (1987), “La Iglesia como
comunión” (1991), “La Vida en Cristo” (1994) y “El don de la Autoridad”
(1999).
Estos textos no constituyen estrictamente declaraciones
autorizadas por la Iglesia católica o por la Comunión Anglicana, pero son
estudiadas y valoradas por ambas.

Sumario)






Benedicto
XVI a los teólogos: Dios se deja comprender por los más
humildes

CIUDAD
DEL VATICANO, miércoles 2 de diciembre de 2009 (ZENIT.org).- El verdadero
teólogo es el que no cae en la tentación de medir con la propia
inteligencia el misterio de Dios, vaciando a menudo de sentido la figura
de Cristo, sino que es consciente de sus propias limitaciones.
Lo
afirmó Benedicto XVI durante la homilía en la Misa celebrada, este martes
por la mañana en la Capilla Paulina del Vaticano, con los miembros de la
Comisión Teológica Internacional, reunidos en su asamblea plenaria anual
desde este lunes, informó Radio Vaticano.
Para el Papa, los teólogos
presuntuosos que estudian las Sagradas Escrituras como algunos científicos
que estudian la naturaleza son similares a los antiguos escribas que
indicaron a los Magos el camino a Belén.
Son, explicó el pontífice,
"grandes especialistas: pueden decir dónde nace el Mesías", pero "no se
sienten invitados a ir".
La noticia "no toca su vida, permanecen fuera;
pueden dar información, pero la información no se convierte en formación
de su propia vida".
"También es así en nuestro tiempo, en los últimos
doscientos años observamos lo mismo -continuó-. Son grandes dotados,
grandes especialistas, grandes teólogos, maestros de la fe que nos han
enseñado tantas cosas".
"Han penetrado en los detalles de las Sagradas
Escrituras, de la historia de la salvación, pero no han podido ver el
misterio mismo, el verdadero núcleo: que este Jesús era realmente Hijo de
Dios", lamentó.
"Se podría fácilmente decir grandes nombres de la
historia de la teología de estos doscientos años de los que hemos
aprendido mucho, pero que no han abierto su corazón al misterio",
destacó.
Con esta manera de proceder, afirmó, "uno se coloca por encima
de Dios". "Se pesca en las aguas de las Sagradas Escrituras con una red
que permite sólo una cierta medida para estos peces y lo que exceda esta
medida no entra en la red y por tanto no existe", explicó.
"Y así, el
gran misterio de Jesús, del Hijo hecho hombre, se reduce a un Jesús
histórico, realmente una figura trágica, un fantasma sin carne y huesos,
alguien que permanece en el sepulcro, que está corrompido, realmente
muerto", continuó.
Sin embargo, el Papa destacó que la historia de la
Iglesia está llena de hombres y mujeres capaces de reconocer su pequeñez
en comparación con la grandeza de Dios, capaces de humildad y por tanto de
llegar a la verdad.
Es una historia que va, por ejemplo, "de
Bernardette Soubirous a Santa Teresa de Lisieux con una nueva lectura de
las Sagradas Escrituras, no científica, sino que entra en el corazón de
las Sagradas Escrituras, hasta los santos y beatos de nuestro tiempo: Sor
Bakhita, Madre Teresa, Damián de Veuster".
El Papa también mostró estos
"pequeños que también son dotados" como modelos de inspiración para "ser
verdaderos teólogos que pueden anunciar su misterio porque ha llegado a la
profundidad de su corazón".
Entre ellos, también nombró a la Virgen
María, al centurión al pie de la cruz y a San Pablo, que "en la primera
carta a Timoteo se llama ignorante en aquel tiempo, a pesar de su ciencia;
pero el resucitado lo toca, se vuelve ciego y se convierte en realmente
vidente, empieza a ver".
"Y el gran docto se convierte en pequeño y,
justamente así, ve la insensatez de Dios que es sabiduría, sabiduría más
grande que todas las sabidurías humanas".
Los trabajos de la Comisión
Teológica Internacional, presidida por el cardenal William Levada,
proseguirán en el Vaticano hasta el viernes, 4 de diciembre.
En esta
primera sesión del nuevo quinquenio, la Comisión decidirá los temas que
tratará en los próximos cinco años y la organización concreta de los
trabajos.
Entre los temas que el cardenal presidente ha pedido a la
Comisión que tome en consideración, figura la cuestión de la metodología
teológica, ya afrontada en el quinquenio anterior.


(Sumario)






El Papa
a Argentina y Chile: Paz es defender la vida y combatir la
pobreza


CIUDAD
DEL VATICANO, domingo, 29 de noviembre de 2009 (ZENIT.org).- Benedicto XVI
ha explicado a las presidentas de Chile y Argentina que la paz no sólo es
evitar la guerra: la paz exige respeto del ser humano, apoyo a la familia,
y lucha contra la pobreza y la corrupción.
La inédita celebración de
los veinticinco años del Tratado de Paz y Amistad, que impidió una guerra
entre ambos países por mediación de Juan Pablo II, le dio la oportunidad a
su sucesor de presentar a Cristina Fernández de Kirchner, presidenta de
Argentina, y Michelle Bachelet, de Chile, los desafíos más apremiantes que
afrontan esas dos naciones mayoritariamente católicas.
"Para que la
causa de la paz se abra camino en la mente y el corazón de todos los
hombres y, de modo especial, de aquellos que están llamados a servir a sus
ciudadanos desde las más altas magistraturas de las naciones, es preciso
que esté apoyada en firmes convicciones morales, en la serenidad de los
ánimos, a veces tensos y polarizados, y en la búsqueda constante del bien
común nacional, regional y mundial", explicó el Papa.
"La consecución
de la paz --añadió en la Sala Clementina del Palacio Apostólico
Vaticano--, requiere la promoción de una auténtica cultura de la vida, que
respete la dignidad del ser humano en plenitud, unida al fortalecimiento
de la familia como célula básica de la sociedad".
Asimismo, siguió
aclarando, "requiere también la lucha contra la pobreza y la corrupción,
el acceso a una educación de calidad para todos, un crecimiento económico
solidario, la consolidación de la democracia y la erradicación de la
violencia y la explotación, especialmente contra las mujeres y los
niños".
Las dos presidentas llegaron al Vaticano abordo de un solo
coche (algo también totalmente singular en este tipo de ceremonias). Ante
todo, el pontífice les concedió audiencias separadas en su biblioteca
privada. En primer lugar, con la presidenta argentina, y después con la de
Chile. Ambos coloquios duraron veinte minutos.
Mientras una presidenta
hablaba cara a cara con el pontífice la otra lo hacía con el cardenal
Tarcisio Bertone, secretario de Estado, acompañado por el arzobispo
Dominique Mamberti, secretario vaticano para las Relaciones con los
Estados.
Un comunicado emitido por la Santa Sede revela que "durante
los cordiales coloquios se recordó con gratitud la meritoria obra de
mediación realizada por el Siervo de Dios el Papa Juan Pablo II y por el
difunto Cardenal Antonio Samoré, que ayudaron a los dos países, a través
del camino del diálogo, a resolver un añeja controversia
territorial".
En particular, sigue diciendo la nota, "se recordó el
hecho de que, en el curso de este cuarto de siglo, el acuerdo ha dado
frutos concretos de bien y de prosperidad a dos pueblos hermanos y sigue
siendo un ejemplo de modelo para los países de América Latina y para toda
la comunidad internacional. También se ha dado un intercambio de puntos de
vista sobre la actual situación internacional".
A continuación, tuvo
lugar el encuentro conjunto con las delegaciones chilena y argentina en la
Sala Clementina, en el que el Papa pronunció su discurso: en el que
constató cómo la mediación del Papa Karol Wojtyla no sólo sirvió para
evitar una guerra por disputas fronterizas, sino sobre todo para edificar
una amistad que ahora se ha solidificado.
"Aquel histórico evento ha
contribuido benéficamente a reforzar en ambos Países los sentimientos de
fraternidad, así como una más decidida cooperación e integración,
concretada en numerosos proyectos económicos, intercambios culturales e
importantes obras de infraestructura, superando de este modo prejuicios,
sospechas y reticencias del pasado".
Para el Papa, "Chile y Argentina
no son sólo dos naciones vecinas sino mucho más: son dos Pueblos hermanos
con una vocación común de fraternidad, de respeto y amistad, que es fruto
en gran parte de la tradición católica que está en la base de su historia
y de su rico patrimonio cultural y espiritual".
Tras su discurso, el
Papa saludó a las delegaciones. Entre los 29 miembros de la delegación
argentina se encontraba el ministro de Asuntos Exteriores Jorge Enrique
Taiana y una representante de las viudas de la Plaza de Mayo, Estela de
Carlotto.
Entre los 27 miembros de la delegación chilena se encontraba
el ministro de Asuntos Exteriores y dos representantes de organizaciones
comprometidas con los derechos humanos, Ana González y Viviana Díaz.
A
continuación, tuvo lugar el intercambio de dones entre el pontífice y las
presidentas, que ofrecieron al Santo Padre una medalla en la que se pueden
ver los perfiles de Juan Pablo II y Benedicto XVI, con la mirada dirigida
hacia Chile y Argentina.
Tras despedirse del Papa, las dos presidentas
descendieron a las Grutas de la Basílica de San Pedro para rezar ante la
tumba de Juan Pablo II.
Más tarde, las jefes de Estado, en automóvil,
visitaron los Jardines Vaticanos y, junto a sus delegaciones fueron
acogidas en la Casina Pío IV, sede de la Academia Pontificia de las
Ciencias, que fue testigo de las negociaciones de paz entre los dos países
hace más de cinco lustros.
En el recuerdo de aquellos diálogos de paz,
el cardenal Bertone rindió homenaje "a todas aquellas personas que, con
generosa dedicación y firme voluntad de paz, lograron llevarlo felizmente
a término, a pesar de las aparentemente insuperables dificultades que se
presentaban en su camino".


(Sumario)






Una
aldea mediática para los cristianos de Medio
Oriente


CIUDAD
DEL VATICANO, domingo 29 de noviembre de 2009 (ZENIT.org).- En la
audiencia general del pasado miércoles, los responsables y operadores de
la emisora radiotelevisiva de Beirut Télé Lumière-Noursat, presentaron al
Papa el proyecto para realizar, en la periferia de la capital libanesa,
una aldea mediática con el objetivo de transmitir el mensaje de paz en
toda el área medio oriental.
Acompañado en el Aula Pablo VI por el
patriarca maronita Nasrallah Boutros Sfeir --informa el diario vaticano
“L'Ossservatore Romano”– , el director general de Télé Lumière, Jacques
Kallassy, dijo que la ciudadela surgirá en 27.000 metros cuadrados en el
barrio periférico de Fatka e incluirá 155 oficinas equipadas, 8 estudios
de grabación, tres canales por satélite, otras tantas estaciones de radio,
un diario cotidiano, una revista, un proveedor de internet.
Se
producirá información en doce lenguas, desde las internacionales –como
francés, inglés y árabe- hasta aquellas más antiguas en Medio Oriente.
“Caldeo, asirio, armenio, pero también griego, portugués –explicó Kallasy-
y todos los otros idiomas hablados por las minorías cristianas que viven
en la zona”.
Se han previsto también librerías, un museo sobre la
presencia cristiana en estas tierras, un teatro, una estructura para
formar operadores de la información, e incluso un centro teológico.
La
primera piedra de la aldea multimedial fue colocada el 1 de octubre de
2008. Ahora, todo está dispuesto para empezar las obras. “Sería mejor
decir –puntualizó Kallasy- la reconstrucción, dado que durante la guerra
de 2006, entre el 12 y el 22 de julio, tres torres de transmisión, una de
las cuales instalada tres meses antes, fueron bombardeadas y destruídas en
las montañas de Sannine y Terbol al norte y en la colina de
Fatka”.
Télé Lumière nació en 1991, precisamente tras otro conflicto
–el que por dieciséis años ensangrentó al Líbano de 1975 a 1991- con el
fin de reencender la esperanza entre la gente corriente.
Fundada por un
monje eremita, el hermano Nour, y gestionada por laicos comprometidos, “es
la emisora de todos los cristianos de Medio oriente –explicó la
responsable de programación Marie-Therese Kreidy- y de los de la diáspora
en los cinco continentes”.


(Sumario)






El
patrimonio cultural cristiano, fundamental para la
humanidad

Ciudad
del Vaticano, 27 Nov. 09 (AICA)La Comisión Pontificia para los Bienes
Culturales de la Iglesia trabaja para promover una mayor conciencia, ante
los organismos internacionales, de que "el patrimonio cultural religioso,
en particular del patrimonio cristiano" es parte importante "del
patrimonio cultural de cada nación y por tanto, en el patrimonio mundial
de la humanidad", se dijo en la rueda de prensa que con motivo del 20º
aniversario de este dicasterio, se llevó a cabo en la sala de prensa de la
Santa Sede, presidida por monseñor Gianfranco Ravasi, y el profesor
Francesco Buranelli, presidente y secretario, respectivamente, de esa
Comisión.
El arzobispo Ravasi recordó que hasta 2007 había un
presidente distinto para el Consejo Pontificio de la Cultura y para la
Comisión Pontificia para los Bienes Culturales de la Iglesia, cada una con
su propia autonomía. Sin embargo, cuando el arzobispo fue designado para
dirigir el dicasterio de la cultura, el Papa quiso que se unificaran la
oficina de la cultura y de bienes culturales con la Comisión Pontificia de
Arqueología Sacra, ya que en realidad las tres se ocupan de temas
estrictamente culturales; la primera sobre la cultura en general; la
segunda, sobre el patrimonio cultural y artístico de la Iglesia y la
tercera sobre las catacumbas y su historia.
Por su parte, el profesor
Buranelli explicó que “la gestión de los bienes culturales eclesiásticos
se organizó según la estructura jerárquica de la Iglesia: en el ámbito de
la Iglesia universal es competente la Comisión Pontificia; las
conferencias episcopales están invitadas a instituir una oficina nacional
para los bienes culturales de la Iglesia”.
El profesor Buranelli puso
de relieve que la Comisión Pontificia, haciendo propias las enseñanzas de
Pablo VI, Juan Pablo II y Benedicto XVI “se esfuerza por no temer la
amistad entre la Iglesia y el arte, aceptando una vez más el carácter
específico del arte en Occidente, de querer buscar a Dios a partir de la
propia conciencia de Hombre, respetando la sensibilidad y la cultura de
cada artista”.
La participación de la Santa Sede en la LIV Bienal de
Arte Contemporáneo de Venecia, con un pabellón promovido por la Comisión
Pontificia, “permitirá mediante un debate entre artistas y teólogos
desarrollar un tejido de imágenes y símbolos que consienta a nuestra
sociedad volver a ser consciente de las propias raíces culturales y de
recuperar la capacidad de ver lo invisible”.
Entre los miembros de la
Comisión Pontificia para los Bienes Culturales de la Iglesia está monseñor
Héctor Aguer, arzobispo de La Plata.


(Sumario)






Cita en Roma para historiadores de la
independencia de la América española

ROMA, martes 1 de
diciembre de 2009 (ZENIT.org).- Del 19 al 22 de abril de 2010, la
Universidad Europea de Roma y el Ateneo Pontificio Regina Apostolorum
acogerán a medio centenar de historiadores en el congreso que organizan
conjuntamente con el Pontificio Consejo de la Cultura bajo el tema: "La
Iglesia Católica ante la independencia de la América
española".
Buscando el primado de la calidad de la investigación, la
convocatoria para el congreso es abierta. Los trabajos serán enviados con
anterioridad a la celebración del simposio. El debate entre los expertos
analizará el papel de la Santa Sede, de los episcopados, del clero secular
y regular y del catolicismo de los laicos en los movimientos de
independencia. Un libro de actas pondrá los trabajos y las conclusiones
del debate a disposición tanto de los estudiosos como de la entera opinión
pública.
Como señala el Documento de Aparecida, "la tradición católica
es un cimiento fundamental de identidad, originalidad y unidad de América
latina" (n. 8). A lo largo de cinco siglos "la Iglesia ha experimentado
luces y sombras" (n. 5) y, ahora "cuando muchos de nuestros pueblos se
preparan para celebrar el bicentenario de su independencia" (n.13), "está
llamada a repensar profundamente y relanzar con fidelidad y audacia su
misión en las nuevas circunstancias latinoamericanas y mundiales" (n.
11).
Con este congreso, Roma se suma a las diversas iniciativas
culturales que se están desarrollando para profundizar en la verdad
histórica acerca del nacimiento de las naciones y la formación de los
Estados hispanoamericanos.


Mayor
información sobre el congreso, puede encontrarse en
www.unier.it y
www.uprait.org o
escribiendo a
congresoromabicentenario@unier.it Las
solicitudes de participación se han de enviar antes del 20 de diciembre de
este año.


(Sumario)






El alma
del sacerdote debe tener “musculatura de Rambo”


ROMA,
domingo 29 de noviembre de 2009 (ZENIT.org).- El alma del sacerdote debe
tener “una musculatura interior de Rambo”, que sea alimentada con “la
oración, la vida interior y la verdadera motivación”.
Así lo indicó el
pasado viernes el secretario para la Congregación del Clero, monseñor
Mauro Piacenza, quien se reunió con un pequeño grupo de periodistas para
presentar algunas reflexiones y actividades que se realizarán en Roma en
el contexto del año sacerdotal, el cual se clausurará el próximo 11 de
junio en la basílica de San Pedro.
Por un lado se refirió al congreso
titulado “Fidelidad a Cristo, fidelidad del sacerdote”, que se efectuará
los días 11 y 12 de marzo en la Pontificia Universidad Lateranense.
También habló del Encuentro mundial de sacerdotes, que presentará varias
actividades académicas y litúrgicas en las cuatro basílicas mayores de
Roma, del 9 al 11 de junio.
La organización de ambos encuentros están a
cargo de la Obra romana de peregrinaciones, dependiente del Vicariato de
Roma, órgano de la Santa Sede.
Temas como la cristología, la identidad
sacerdotal, los desafíos que enfrentan estos hombres en la cultura
contemporánea, la liturgia, el celibato y la actividad pastoral, serán
tratados en dichos eventos que estarán dirigidos no sólo a sacerdotes sino
también a seminaristas, diáconos permanentes y laicos.
El viernes 11 de
junio, solemnidad del Sagrado Corazón de Jesús del año próximo, se
clausurará el año sacerdotal con la celebración de la Santa Misa en la
Basílica de San Pedro, presidida por el Papa Benedicto
XVI.

Frutos maduros
Monseñor Piacenza aseguró que durante
este año conmemorativo, del cual van ya transcurridos cinco meses, muchos
sacerdotes se han renovado en su vocación y aclaró que “por renovación no
se entiende revolución” sino “renovación interior”, es decir, un
descubrimiento de las fuentes y de la vocación al sacerdocio.
Indicó
que en este año se debe “expresar la gracia por un servicio que tantas
veces se hace escondido”, refiriéndose a las actividades pastorales y
litúrgicas que desempeñan tantos sacerdotes.
Señaló monseñor Piacenza
que son varios los aspectos de la vocación sacerdotal que se pretenden
resaltar. En primer lugar, la adoración eucarística: “lo primero que
debemos hacer es orar”, aseguró el secretario para la congregación del
Clero.
Destacó también el papel que están realizando varias diócesis en
el mundo, muchas de las cuales han dado un especial énfasis en las
jornadas de adoración al santísimo por la santidad de los
sacerdotes.

Ejemplo de los santos
“Los sacerdotes a veces
deben remar contra corriente”, dijo monseñor Piacenza, hablando “en
sentido evangélico, es decir, hacer guerra, pero de santidad”.
Invitó a
recordar la figura del llamado santo Cura de Ars: “¿Qué hizo de
extraordinario?” se preguntó. “Nada”, respondió. “Lo centró todo en su
vocación: las obras pastorales, la eucaristía y la confesión”.
Respecto
al sacramento de la confesión, monseñor Piacenza afirmó: “Ojalá todos los
sacerdotes fuésemos 'explotados' por los fieles”.
Refiriéndose a san
Juan María Vianney indicó que “no tenía dotes particularísimas de
inteligencia”, pero “fue un pastor excepcional. No se licenció en
pastoral”, porque la labor de un sacerdote se aprende especialmente “con
el amor de Dios”.
Igualmente, aseguró que en este año se quiere
resaltar el aspecto de la maternidad espiritual, recordando el ejemplo de
Santa Teresita del Niño Jesús, quien ofreció tantas oraciones, sacrificios
y mortificaciones por la santidad de muchos sacerdotes, hasta el punto de
ser declarada patrona de las misiones, pese a su condición de religiosa de
claustro.
“Ella fue una madre dentro de la comunidad del Carmelo. Se
convirtió en el ángel de la guarda de muchos sacerdotes”, aseguró monseñor
Piacenza.
El secretario de la Congregación para el Clero indició que en
la historia reciente de la Iglesia no se ha realizado dedicado nunca un
año a los sacerdotes.
No obstante, en ocasiones anteriores se han
realizado varios encuentros internacionales, entre 1996 y 2004 que han
tenido lugar en Fátima (Portugal), Yamusukro (Costa de Marfil), Guadalupe
(México), Tierra Santa, Roma (en ocasión del Jubileo de 2000) y
Malta.
Más información y reservas para participar en el clausura del
Año Sacerdotal en
www.josp.com o
a.sacerdotalis@orpnet.org


(Sumario)






Belén se prepara para la Navidad

BELÉN,
martes, 1 diciembre 2009 (ZENIT.org).- La ciudad en la que nació Jesús ha
comenzado la preparación para la Navidad y en la plaza del Pesebre ya se
pueden ver las luces y escuchar los cantos de Adviento.
Con ocasión del
primer domingo de Adviento, el custodio franciscano de Tierra Santa, fray
Pierbattista Pizzaballa, realizó el ingreso solemne en Belén este sábado,
28 de noviembre. La celebración ha tenido lugar en momentos en los que la
ciudad recupera su entusiasmo, con la llegada de peregrinos, tras la
tensión que se vivió con la Intifada de los primeros años de esta
década.
Su entrada solemne estaba precedida por una pequeña parada en
el monasterio de Mar Elías donde el representante de los franciscanos de
Tierra Santa fue recibido por los alcaldes y algunos habitantes de los dos
pueblos vecinos a Belén: Beit Sahur y Beit Jalla.
Después, siguiendo el
antiguo camino de los patriarcas, el cortejo no pasó por el puesto de
control habitual sino que atravesó el enclave israelí surgido en torno a
la tumba de Raquel, respetando de este modo una tradición que tiene lugar
en el respeto del "status quo", del estatuto jurídico de los Santos
Lugares.
En la plaza del pesebre esperaban al custodio el párroco de
Belén, fray Samuel Fahim, junto a las autoridades civiles locales.
Una
vez efectuado el ingreso por la puerta de la humildad, tras saludar al
representante de la Iglesia greco-ortodoxa, el custodio se dirigió hacia
el claustro franciscano.
Dentro de la iglesia de Santa Catalina fue
recibido por el guardián del santuario, fray Jerzy Kray, mientras se
entonaba el canto del "Te Deum".
Tras la bendición solemne, la numerosa
asamblea reunida para la celebración presentó sus felicitaciones al
custodio que estaba acompañado por el vicario, fray Artemio Vítores, el
ecónomo, fray Dobromir Jaztal, el guardián, el párroco y algunos frailes
de la comunidad de Belén.
Este ingreso es al mismo tiempo formal y
familiar. Aunque responde a las exigencias, a veces pesadas, del "status
quo", el ingreso es vivido por los fieles como una manifestación de
atención por ellos por parte de la Custodia franciscana desde hace siglos.
A través de su presencia, los fieles manifiestan oficialmente su
agradecimiento a la Custodia, en la figura de su representante.
Los
frailes franciscanos, venidos desde Jerusalén, se vuelven a reunir luego
en un almuerzo festivo al final de cual regresan a la iglesia para cantar
el oficio de vísperas. Aquí, durante el lucernario, encendieron la primera
vela del Adviento.
Este año, los franciscanos han querido dar un
sentido especial a este gesto, conmemorando de esta forma los 800 años de
la fundación de la orden.
"Queremos que esta luz brille como el sol
para que nos muestre el camino de nuestra santificación y así el don del
Evangelio, que está en la base de nuestra fraternidad, pueda llegar a
todos los hombres", se puede leer en el sitio de la Custodia Franciscana
de Tierra Santa
www.custodia.org
Al
día siguiente, domingo 29 de noviembre, la misa dominical de las 9 de la
mañana reunió a un gran número de parroquianos, celebrando al mismo tiempo
el inicio de un nuevo año litúrgico junto a la fiesta patronal de la
parroquia, dedicada a santa Catalina.
Al final de la misa, que fue
presidida por el custodio, el párroco dio las gracias a los dos Caballeros
del Santo Sepulcro polacos que financiaron las obras de reestructuración
del edificio, incluyendo la restauración de los frescos y la renovación
del sistema de iluminación, que ahora se integra mejor con la
arquitectura.
Alrededor de un millón y medio de personas visitaron
Belén en el 2008, de acuerdo al Ministerio de Turismo palestino, un
pequeño éxito con respecto a años precedentes. En este año, se espera que
el número sea superior.
(Sumario)






Una
eterna
deuda de gratitud con Angelo Roncalli

NUEVA
YORK, sábado 28 de noviembre de 2009 (ZENIT.org).- Publicamos el
comentario que ha compartido con ZENIT Baruj Tenembaum, judío nacido en
Argentina y fundador de la Fundación Internacional Raoul Wallenberg, en
recuerdo del aniversario de nacimiento de Juan XXIII.

Angelo
Giuseppe Roncalli (luego conocido como Papa Juan XXIII) nació hace 128
años, el 25 de noviembre de 1881.

Su misión como Papa es bien
conocida, en especial su contribución decisiva en el establecimiento de un
diálogo respetuoso entre católicos y judíos, tal como lo demuestra el
"Decretum de Judaeis" (Decreto sobre los judíos), elaborado por el Segundo
Concilio Vaticano. El documento menciona abiertamente los "males
realizados a los judíos tanto en el pasado como en el presente. Quien
desprecie o persiga a este pueblo comete un perjuicio contra la Iglesia
Católica". Roncalli fue el padre de ese Concilio e insistió en la
necesidad de referirse a las enseñanzas de la Iglesia acerca del judaísmo
e Israel. En 2000 fue beatificado.
Por otra parte, las acciones de
Roncalli anteriores a su asunción como Sumo Pontífice son poco conocidas.
Como Delegado Apostólico en Estanbul, durante el Holocausto, Roncalli
cumplió un rol estratégico realizando esfuerzos para salvar judíos.
Una
investigación exhaustiva publicada por el Comité Angelo Roncalli, la Casa
Argentina en Israel Tierra Santa y la Fundación Internacional Raoul
Wallenberg, con la participación de destacados académicos, muestra que
Roncalli fue más allá del cumplimiento de su deber como Delegado
Apostólico y extendió una mano de ayuda a los judíos perseguidos. Entre
otras acciones despachó "Certificados de Inmigración" a Palestina a través
del correo diplomático del Vaticano y, también, "Certificados de
Bautismo". Asimismo, intervino abiertamente en favor de judíos búlgaros y
eslovacos.
Las tres ONG mencionadas, las cuales he tenido el privilegio
de fundar con muchos otros factores, presentarán los resultados de las
investigaciones a Yad Vashem (la Autoridad para el Recuerdo de los
Mártires y Héroes del Holocausto) y solicitarán que se le confiera a
Roncalli el título de "Justo entre las Naciones".
Aún menos conocido es
el relato que escuché en una reciente reunión con el ex ministro de
inmigración Iair Tzaban, relacionado a la cálida actitud de Roncalli hacia
los judíos y a su contribución al establecimiento del Estado de
Israel.
En los años '50 Tzabam era el asistente personal del doctor
Moisés Sneh, quien en 1947 era el jefe del departamento político de la
Agencia Judía en Europa y también estaba a cargo de la aliá, así como de
los asuntos relacionados a la inmigración ilegal de judíos a Palestina.
Fue el doctor Sneh quien reveló la participación de Roncalli, la cual,
muchos consideran, fue de gran importancia para la creación del Estado de
Israel.
En 1947, Moshe Shertok (luego Moshe Sharet, Primer Ministro de
Israel entre 1953 y 1955), jefe de Sneh por entonces, estaba preocupado
por la incertidumbre que le provocaba el destino del voto de los países
latinoamericanos en la inminente Asamblea General de las Naciones Unidas
que trataría el plan de partición. En particular, lo preocupaba la
influencia que el Vaticano tenía sobre esos países y temía que la Santa
Sede estimulara un voto